CARL FILLION: «ME GUSTA TRANSFORMAR EL ESPACIO»

Por Rafael Caunedo

Carl Fillion

Carl Fillion es escenógrafo. Con eso bastaría para querer sentarme a su lado en cualquier cena, pero es que él no es un escenógrafo más. Cuando le escribo un mail, nunca sé desde dónde me va a contestar. Ahora está en Nueva York, en el Metropolitan, con el Anillo del Nibelungo. Para conocer su trabajo, nos introduce en la evolución de la escenografía.

La escenografía ha conocido varias “revoluciones” de desarrollo en la historia. Los griegos introdujeron los periactos (que es probablemente la primera escenografía móvil), pasando por las maquinarias elaboradas de Sabbattini en el siglo XVI, las pinturas de fondo en falsa perspectiva en el siglo XVIII y el naturalismo al principio del siglo XX. Greg y Apia en han revolucionado también la escenografía introduciendo el simbolismo, los niveles en el espacio. Con el siglo XXI vivimos otra revolución escenográfica, gracias a las nuevas tecnologías.

Primero, las técnicas de construcción están cambiando las posibilidades de lo que es posible alcanzar en complejidad técnica y la relativa ligereza y solidez permite conseguir elementos móviles practicables como nunca ha sido posible hasta ahora.

Segundo los proyectores de vídeo tienen ahora una potencia suficiente para convivir con las luces como nunca fue posible antes.

Tercero los ordenadores nos permiten crear sistemas de control de una precisión casi perfecta para elementos móviles y también para crear sistemas de control de las imágenes que proyectamos en el escenario. Permitiendo entre otras cosas hacer interactuar el actor con las proyecciones en directo, dando una nueva forma de ver las imágenes proyectadas.

Combinando esos puntos anteriores, el campo de posibilidades escenográficas es más amplio que nunca. Entonces, para mí, la escenografía es decoración, arte e ingeniería.

 Teniendo en mente lo que dije antes, la escenografía es hoy parte íntegra del espectáculo.  Quiero decir que participa al contar una historia activamente, no solamente dar un ambiente de fondo pasivamente. Puede llegar a ser casi un personaje. La escenografía vive…

Me resulta curioso hablar con Carl de estas cosas y no hablar del colegio de los niños y todo eso. Lo dejaremos para el off the

1984, Convent Garden, Londres

record. Sigue entonces hablando sobre sus inicios.

Yo fui alumno de escenografía en el Conservatorio de Arte Dramático de Quebec durante diez años. La formación ahí es una transmisión de conocimientos por parte de profesionales del escenario.

“La escuela” es un atajo para tener una base de conocimientos. Aparte las excepciones, es un muy largo camino ser autodidacta, pero no imposible.

En mi caso si no fuera que hice el Conservatorio, es muy poco probablemente que hubiera podido tener la carrera que tengo ahora. Lepage vio mis proyectos de final de carrera al Conservatorio y fue el principio de todo!

Me doy cuenta de que no suelo preguntarle por su manera de trabajar. Siempre me cuenta cotilleos de los escenarios, de los actores y los músicos, pero no de su trabajo en el estudio. Pues ya va siendo hora.

Antes de empezar,  la mayor parte del tiempo no tengo ni idea a dónde empieza ni donde terminará el proyecto. Y si creo saberlo, cambia mucho en camino… Sin embargo, sí que sé en parte en qué campo me lanzo. Me refiero a si habrá proyecciones o no, por ejemplo. Ese punto cambia toda la forma de pensar y de acercarse a un proyecto nuevo. Por ejemplo en el Anillo de los Nibelungos que estoy terminando ahora, sabía desde el principio que quería un dispositivo escenográfico que permitiera presentar las cuatro óperas en el mismo dispositivo.

 Eso son parámetros de creación. Pero a partir de ahí, la página es blanca…

La casualidad hizo que Carl se casara con una amiga mía, lo que hizo que, durante los años que vivió en España, tuviéramos una relación personal, por lo que estoy yo mismo descubriendo un nuevo Carl hablando en serio. Eso sí, le agradezco su esfuerzo por contestar en castellano y no en su francés de Quebec. 

 Creo que la calidad artística de cualquier proyecto se encuentra en el trabajo. Me parece una respuesta aburrida… Pero es así que lo veo. La dedicación al 100% es parte fundamental para conseguir calidad. Luego siempre te puedes equivocar . Pero claro que el presupuesto no significa que la calidad artística sea mejor, desde luego.

The rake's progress. La Monnale, Bruselas; L'opéra de Lyon; San Francisco Opera, Covent Garden, Londres, Teatro Real, Madrid

De lo que sí puedo dar fe es de su constante ir y venir por todo el mundo. Para pillarle en casa y tomar una caña hace falta que se confabulen los planetas.

En superficie es muy parecido. Pero con las comunicaciones tan desarrolladas y sobre todo el transporte tan fáciles hoy que sin darte cuenta cambias de país, de continente.  En ocho horas desde Montreal o New York estás en cualquier país de Europa prácticamente.  Con tantas facilidades, hemos perdido la sensación de distancias, de diferencias y te crees que somos todos iguales. Trabajé en varios países y la verdad es que el mundo del espectáculo es muy pequeño, se usa mas o menos las mismas formas de trabajar. Pero hay diferencias de cultura entre los países, lo hay y si no lo tomas en cuenta crea fricciones y frustraciones.

Me extraña que, con lo buena gente que es, Carl cree fricciones y frustraciones… pero bueno. El caso es que me cuenta ahora sus recursos de inspiración y documentación.

 Antes eran los libros de las bibliotecas, librerías y revistas principalmente. Era todo un trabajo la de documentarse. Hoy es internet principalmente y los libros. No nos movemos tanto para buscar las informaciones o inspiraciones. Aunque sigue siendo una tarea grande la parte de documentación. Para mí es fantástico tener acceso a esta herramienta que es internet. Pero siempre gusta hojear un buen libro.

 Si alguien no ha visto un espectáculo de Robert Lepage, le diría que, si tiene oportunidad, no se lo pierda. Yo me reconozco devoto y ferviente seguidor.

 Ex Machina es la compañía de creación y de producción de Robert Lepage. La creación de esa compañía en 1994 tenía como objetivo reunir varios creadores en un mismo lugar. Autores, actores, video artistas, escenógrafo, para concentrar las fuerzas alrededor del desarrollo del proyecto. Es un lugar con un espacio multifuncional, no muy grande pero lo suficiente como para servir de laboratorio a todos los espectáculos que creamos. Yo tuve mi estudio ahí mismo durante varios años desde la creación de la compañía. Llevo ya casi 20 años trabajando con Robert. La mitad de los conceptos escenográficos que hice los hice para sus proyectos.

 Nos habla también sus sueños… los confesables.

Hay tipos de proyectos o lugares que me apetecen. De teatro, ópera, danza o circo. Nacho Duato por ejemplo es un coreógrafo con quien me gustaría hacer un proyecto. Hacer una ópera en el festival de Bregenz es otro proyecto que me apetecería…

 Cuando tienes varios proyectos sobre la mesa ¿Qué hace que te decidas por uno u otro?

 El calendario de producción es lo que determina que hago cada día.

 Su trabajo tiene tanto prestigio que el Circo del Sol descolgó el teléfono y le llamó.

 Colaboré con ellos  en algunos proyectos y diseñé un  espectáculo: Totem. Cada vez fue una experiencia muy agradable. Es una muy grande empresa que produce espectáculos muy grandes. Para un creador como yo es muy interesante hacer parte del equipo de creación de un proyecto, hay mucho soporte a la creación. Mucha gente y muchos medios. El circo no es un medio fácil para montar un espectáculo de este nivel. Hay muchos impedimentos.  Cuando piensas que un espectáculo de carpa que gira de media durante doce años o mas a razón de diez espectáculos a la semana, más de 300 al año, es muchísimo ! Eso lleva sus impedimentos al momento de crear el espectáculo.  Montar un solo numero acrobático del nivel de lo que se ve en los espectáculos del Circo del Sol, se calcula en años. O sea que los (más o menos) ocho números que contiene un espectáculo no pueden ser todos nuevas creaciones acrobáticas, sería demasiado largo de montar. Hacen normalmente uno o dos nuevos y compran números ya existentes que envolvemos visualmente para integrarlos en el concepto de cada espectáculo. Eso también lleva muchos impedimentos de creación. En fin nunca es sencillo montar cualquier espectáculo de todas formas…

 ¿Qué trabajos te han influenciado más en tu manera de proyectar?

 Apia, Greg y Svoboda han sido muy importantes para mí al momento de estudiar en el Conservatorio. Luego pues el arte contemporáneo, la arquitectura y la pintura son mis principales fuentes de influencias. Descubrí la danza tarde en mi vida. La descubrí gracias al trabajo de mi mujer y ahora es un medio artístico que me gusta muchísimo y me inspira. A mi me gusta mover, transformar el espacio. La danza es también eso.

 ¿En que proyectos andas metido y cuales tienes pendientes?

 Acabo de terminar una etapa muy intensa de varios proyectos. “Totem” del Circo del Sol, “The Nightingale and Other Fables”  de Stravinsky y ahora estoy terminando El Anillo de los Nibelungos en el Metropolitan de NY, después de 6 años de trabajo. No tengo otros proyectos en marcha pero hay propuestas en la mesa para el futuro, lo cual no puedo hablar de momento.

Yo, humildemente, os recomiendo echar un ojo a su página para que veáis sus trabajos y sus proyectos futuros. Por cierto, hemos quedado que en julio hace un hueco para venir unos días a nuestra casa de Asturias.

http://web.mac.com/fillioncarl/Sitio_web/Bienvenida.html

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